La riada en Valencia
Se conoce como la Gran riada de Valencia a la inundación que tuvo lugar el 14 de octubre de 1957, en la cuenca del río Turia, a su paso por la ciudad de Valencia, España, y que causó más de 400 muertos, además de cuantiosos daños materiales.
El día 13 se dieron precipitaciones de más de 300 mm en buena parte de la cuenca (361 mm en Bejís, aunque esta población está ubicada en la cuenca del río Palancia, es decir, fuera del área drenada por el Turia), que continuaron el 14 con más de 100 mm. Se originaron dos ondas de crecida sobre Valencia, la primera de 2.700 m³/s y una velocidad media de 3,25 m/s; la segunda, más violenta, de 3.700 m³/s y 4,16 m/s, inundando la mayor parte de la capital valenciana.
Como dato curioso, la zona próxima a la Catedral quedó libre de las aguas, lo que demuestra lo acertado del emplazamiento original. Es posible que esta zona algo más elevada sea el motivo por el que el cauce del Turia formó una amplia curva a manera de semicírculo en torno a la ciudad, a la cual rodea hacia el norte, quedando esta zona de la Catedral en el centro. En cambio, la zona de la calle de las Barcas, cuyo nombre obedece a que constituyó un atracadero para las embarcaciones que remontaban el Turia en la antigüedad, no sólo se inundó sino que los colectores de drenaje actuaban como surtidores al quedar el nivel de las aguas del río por encima de la calle, agravando así los enormes daños ocasionados por la inundación.
Consecuencias
Tras esta riada se desvió el cauce del Turia al sur de Valencia, por el llamado Plan Sur, dotándolo de una capacidad que se calcula en 5.000 m³/s, además de otras obras menores de regulación del río.
Las alturas alcanzadas durante la riada en algunos lugares de la ciudad fueron muy variadas. Desde los 40 centímetros en la Avenida Reino de Valencia, pasando por los 80 centímetros en los Jardines del Real (Viveros), 2,25 metros en la Plaza de Tetuán, 2,70 metros en la Calle Pintor Sorolla, 3,20 metros en los Jardines del Parterre, 4 metros en la Calle de Las Rocas, hasta los 5,20 metros en la Calle Doctor Oloriz.
Las fuertes lluvias afectaron también a otras zonas de la provincia de Valencia. El barranco del Carraixet, con un cauce muy amplio cuando baja de la Sierra de Calderona y alcanza las tierras de llanura (casi 200 m de ancho entre Bétera y Moncada) también se desbordó y sus aguas se juntaron con las del Turia antes de llegar al mar, cerca de Alboraya.
Otro foco importante de precipitaciones fue la cuenca del Palancia, que alcanzó el récord histórico de 900 m³/s y se desbordó en Sagunto.
Tras la riada, ante la tardanza de las ayudas por parte del gobierno, el alcalde de Valencia, Tomás Trénor Azcárraga, se enfrentó a Francisco Franco el cual le destituyó, pero el alcalde logró su objetivo ya que a partir de sus críticas se agilizó la ayuda a la ciudad y el proyecto del Plan Sur.